top of page
Foto del escritorZulma Pacheco

Sólo se vive una vez, hagamos que valga la pena

Este blog es muy especial para mí, quiero comenzar el año escribiendo una historia inspiradora de alguien que vivió algo increíble en el pasado mes de diciembre. Gracias Luz y a ti Eduardo que me motivaron y me permitieron escribir un poco de su historia.



La temporada navideña para muchos es una época de mucha nostalgia, tristeza, tiempo de malos recuerdos; sin embargo, para otros es un tiempo de fiesta, conexión con la gente que amas, diversión, sensibilidad, gran entusiasmo, también de sorpresas y milagros. ¡Yo soy de este último grupo, amo estas fechas!


Me encanta esta época, para mi siempre es una temporada muy esperada a lo largo de todo el año, algo que hacemos con mi hija frecuentemente es ver películas navideñas, nos encantan las luces y decoraciones propias de este mes, cada película inspira a fortalecer el amor en familia, es motivacional observar vidas que de ser infelices y sin motivación, se transforman por “el espíritu de la navidad” para disfrutar de la vida; sé que muchos han de estar pensando ¡que cursi, que aburrido, todas las películas son iguales llenas de romanticismo y fantasía! y sí … así son en su mayoría. Aunque ahora conocí muy de cerca una historia real que me parece parte de una película de navidad mágica y quiero contárselas brevemente.




Justo a mitad del año pasado, llegó a terapia una mujer de mediana edad a la que llamaré Luz por confidencialidad, con una presencia fuerte, ecuánime, muy correcta en su expresión, soltera, llena de ambición por la vida, muy entusiasta con el servicio y la ayuda a los demás como misión de vida, comprometida con el trabajo hasta un modo extremo, trabajaba casi los 7 días de la semana. Todo parecía “estable” en su vida aun en medio de tantas horas de trabajo y de los estragos del confinamiento por pandemia; sin embargo, ella identificaba que “algo” faltaba y que intencionalmente evadía siendo el motivo de consulta.


Luz expresaba recurrentemente que era felizmente soltera pero que entendía que este hueco de pareja estaba ahí siempre presente, ella había tenido en su pasado relaciones que no habían sido satisfactorias, especialmente porque existieron escenarios de total desconfianza y gran cantidad de mentiras; por lo que ella refiere, dejó de haber relación alguna que se mantuviera así en el tiempo; sin embargo en este momento de su vida reconocía que había aprendido a cuidarse emocionalmente y ahora se estaba dando cuenta que se había ido al extremo exagerado, bloqueaba toda posibilidad de sentirse expuesta a una nueva relación. La realidad es que Luz tenía mucho miedo de volver a intentarlo en esta etapa de mediana vida, restando toda posibilidad de conocer a alguien, de volver a amar y disfrutar plenamente de un nuevo compañero de vida que en el fondo anhelaba.


Unos meses después de comenzar su proceso terapéutico, Luz llegó un día a sesión contándome que le había llamado por teléfono un proveedor, a quien llamaré Eduardo que vivía en Monterrey, para ofrecer sus servicios a la empresa en donde ella se encontraba trabajando; Luz decidió darle cita virtual para escuchar sus propuestas sobre sus servicios, después de algunas reuniones de trabajo, ocurrió la magia, la resistencia bajó y Luz se permitió conectar con Eduardo, comenzaron a pasar los días y semanas con un sin número de mensajes mutuos, largas conversaciones de todo y de nada, solo con la firme intención de sentirse en compañía, abrazándose las almas a muchos kilómetros de distancia.


Finalmente, el día llegó y se conocieron en vivo y a todo color ¡Que emoción!, Yo había visto a Luz en sesión un día antes de la cita y ella estaba realmente muy entusiasmada y ciertamente un poco asustada, creo que era parte de lo mágico de la historia. Solo un par de días juntos fueron suficientes para conectar desde esa energía sobrenatural que solo los amantes del amor experimentan. Luz cuenta con gran brillo en sus ojos que cuando se vieron por primera vez con Eduardo, no hubo más espacio, sus cuerpos hablaron, no más resistencia solo se dejó envolver en una esfera de gran conexión, de alegría, de esperanza y de sensaciones que tenían ambos muy anestesiadas en sus vidas. Disfrutaron largas charlas amorosas, mirándose a los ojos intentando descubrir el universo de cada uno, compartieron por largas horas la música de su época. Luz claramente sabía que a lo que se le llama amor, ahora lo estaba experimentando desde un lugar, edad y madurez diferente; la pasión y el deseo surgieron de formas tan espontaneas y divertidas en medio de algo tan intangible con las luces propias de la época de fondo; después de todo, solo tenían 48 horas para ser y estar el uno para el otro, aunque . . . tenían toda la eternidad para volverse a encontrar.


Luz aun con todas sus reservas y con discrecionalidad por ser Eduardo para ella un perfecto conocido-desconocido, fue abriendo su corazón poco a poco; pues ellos sentían que tenían muchos años de conocerse cuando solo tenían menos de dos días de estar juntos. En su sesión posterior a que Eduardo regresara a Monterrey, Luz comentó que él le hizo un preciado regalo muy simbólico y energético “Un Japa mala” (un instrumento de gran valor espiritual utilizado en el hinduismo y el budismo), cargado de amor y compromiso para cuidar su alma, Luz le respondió que ella iba a amar su alma siempre, que iban a estar conectados, aunque no estuvieran juntos. Realmente muchas emociones y sensaciones vividas por estas dos extraordinarias personas.




La magia siguió entre ellos, Eduardo regresó a Monterrey y Luz continuó con su rutina llena de actividades. Ahora la vida misma los ha puesto en diferentes momentos, Luz cuenta que Eduardo tiene grandes retos y desafíos por resolver y enfrentar, haciendo consciencia de lo que realmente quiere conseguir en esta nueva etapa de vida conduciéndose intencionalmente con veracidad y honestidad; Luz con sus propios encuentros y desencuentros consigo misma, con sus metas y sueños por lograr, siendo fiel a sus compromisos y así misma, para no permitirse de nuevo relaciones de amor en pareja que no sean sanas.


Luz en su última sesión conmigo de este mes realizó un ejercicio simbólico en el cual se agradece a ella misma su valentía por vivir esta experiencia, se siente muy orgullosa por darse el permiso para aprovechar esta oportunidad que el universo le regala, agradece haber conocido a Eduardo y contactar con un alma tan especial, menciona que, esa mirada tan dulce de él nunca la olvidará, agradece a Eduardo su tiempo, persistencia, amor, deseo de estar y quedarse el tiempo que la vida permita, por lo que respecta a ella hará todo lo mejor que pueda para vivir plenamente cuidándose siempre.


Apenas es enero de 2021, estamos comenzando este año, no sé qué vaya a pasar entre ellos, Luz sigue en su proceso aprendiendo más a cuidarse, a sentirse merecedora de una relación honesta y amorosa, está contenta con lo que la vida le trajo y le traerá, lo cierto es que la experiencia que se permitieron vivir en esta historia de navidad es digna de compartir, que dos personas maduras decidieran ser valientes en experimentar este encuentro de almas no es algo que pueda darse todos los días en medio de una crisis mundial de confinamiento y de tanta problemática social.


La reflexión para cualquier mujer u hombre que lee esto es que solo se vive una vez, así es que haz que valga la pena, este es tu presente y nadie lo vive por ti. La magia ocurre entre dos personas adultas dispuestas a amarse honestamente y desde la confianza. La vida está llena de milagros, pero a veces cuesta mucho trabajo verlos, no desaproveches la oportunidad que la vida te pone frente a ti. No desistas de vivir historias extraordinarias. Para poder estar y ser pareja se necesita ser un adulto responsable para encontrarse con otro adulto en igual circunstancia.


Eres más que materia y energía, eres alma y espíritu, puedes vibrar más allá de tus propios límites, realmente no sabes si hay una vida o muchas vidas más, pero hoy es tu presente, no te pierdas la oportunidad de experimentar el amor, la conexión, la ternura de estar con alguien valioso; solo por no darte permiso de sentir, de vivir y de ser feliz el tiempo que dure. Nada es para siempre todo es temporal. Haz que sucedan cosas extraordinarias para que tengas una vida extraordinaria.



Con cariño,

Zulma Pacheco


45 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page